Artrosis de rodilla
¿Qué es la artrosis de rodilla?
La artrosis de rodilla es un proceso degenerativo que provoca una progresiva pérdida del cartílago articular en la articulación formada por el fémur distal, tibia proximal y la rótula.
El diagnóstico se realiza mediante radiografías de la cadera y la exploración física.
¿Cual es el tratamiento de la artrosis de rodilla?
El primer escalón del tratamiento es conservador con antiinflamatorios o infiltraciones en pacientes con poca sintomatología.
La prótesis de cadera está indicada cuando los síntomas empeoran y en la degeneración severa.
¿A quién suele afectar la artrosis de cadera?
La incidencia de artrosis de rodilla de 240 por 100 000 hab/año, mientras que la de cadera es de 88 por 100 000 hab/año, siendo la
Los factores de riesgo modificables son: trauma articular, debilidad muscular, trabajos de esfuerzo o de arrodillarse de manera muy frecuente y el síndrome metabólico.
Los factores de riesgo género, siendo más frecuente en mujeres que en hombres, edad avanzada, genética o raza.
¿Qué síntomas presenta la artrosis de rodilla?
El paciente nos contará que la rodilla le limita en su vida diaria, refiriendo dolor e incapacitándole para realizar cada vez distancias más largas. Puede sufrir inflamación de la rodilla, sensación de chasquido o inestabilidad.
La exploración física es muy importante. Los cirujanos ortopédicos debemos valorar al paciente en su totalidad, valorando la marcha, alineación de las extremidades, cicatrices, cirugías previas, movilidad o la integridad ligamentosa entre otros.
Tratamientos para la artrosis de cadera
En primer lugar se debe tomar medicación antiinflamatoria y analgésica, utilizar bastón para caminar y perder peso.
Una parte muy importante en las fases iniciales de la artrosis de rodilla es la fisioterapia.
Muchos pacientes en estadíos iniciales pueden beneficiarse de infiltraciones con ácido hialurónico o con plasma rico en plaquetas.
Cuando todas estas medidas fallan, es cuando debemos plantearnos la opción quirúrgica en nuestra rodilla.
Dependiendo de los hallazgos de la exploración física y las pruebas complementarias, tenemos varias opciones quirúrgicas:
OSTEOTOMÍA TIBIAL
Cirugía recomendada para aquellos pacientes jóvenes con artrosis medial unicompartimental.
Se trata de hacer unos cortes en la tibia para mejorar la alineación de la rodilla y liberar el espacio articular afectado
PRÓTESIS UNICOMPARTIMENTAL DE RODILLA
Cirugía recomendada para aquellos pacientes con afectación de un solo compartimento.
Las indicaciones para este tipo de prótesis son muy estrictas por lo que las pruebas complementarias y la exploración física son fundamentales en estos casos.
PRÓTESIS TOTAL DE RODILLA
Cirugía indicada en personas de edad más avanzada y cuando la artrosis es en más de un compartimento.
Todas ellas son intervenciones mayores que no están exentas de riesgos, siendo la tasa de éxito elevada cuando están bien indicadas.
El paciente suele estar ingresado entre dos o tres días y se va de alta del hospital caminando con ayuda de dos muletas en la mayoría de los casos.